UN VIDRIO
Hay distintos modos de transitar la ciudad. Desde el auto todo transcurre sin grandes contratiempos una vez que uno aprendió a resignarse al tráfico del centro porteño. Y es bien sabido que una resolución eficaz para la resignación es el aislamiento. Con las ventanas bien cerradas por el frío, la radio prendida y el automatismo de frenar y arrancar esquivando motos y colectivos, los edificios y los semáforos se suceden. Somos lo que parecemos, pequeños destinos volviendo a nuestros hogares, ensimismados, abismados en nosotros mismos. Los otros autos, la gente agolpada en los colectivos o aún más contracturada por debajo, en el subte, todos somos lo que parecemos. Una marea humana de aislamiento en la muchedumbre, un terror de mirarnos a los ojos, porque ¿qué hemos de hacer si nos encontramos?
En la esquina de Avenida Córdoba y Larrea, en ese lugar donde el transitar se hace espeso, justo en ese lugar, Luis limpia los vidrios de los autos atrapados por el semáforo. Más que preguntar, la realidad irrumpe. Y eso es Luis, aunque él lo desconozca, porque su condición de sujeto le es negada sistemáticamente. Es una realidad humana que irrumpe de tal modo que uno no pueda decir que no. Voy a explicarme mejor. La mayoría de los automovilistas dicen “no”, pero el aviso ya está dado. La mecánica de la ciudad es de autos por las calles y transeúntes por las veredas. Tránsito, trenes, transeúntes y Luis. ¿Qué es lo que él está haciendo allí?
Si le preguntáramos, él diría “me estoy ganando una moneda”. Si le damos una moneda, como si fuera una limosna, él nos dice “dejame que me la gane” y nos limpia el parabrisas aunque esté impecable. "Trabajo" es la palabra que me parece más adecuada, pero ¿quién se atrevería a decirlo? Porque si eso es trabajo ¿qué nos diferencia a los que vamos dentro del auto, los que trabajamos de verdad? En esos lugares preparados para trabajar, está claro cuál es el adentro y cuál el afuera. Y lo mismo pasa cuando vamos en nuestros autos.
Nosotros, los que no estamos obligados a establecer nuestro trabajo en un lugar donde se transita, los que podemos decir “yo trabajo” sin generar polémicas. Nosotros, los que tenemos curriculum vitae, tarjetas personales, escritorio, los que tenemos la billetera llena de credenciales con nuestro nombre. Los que pertenecemos al gimnasio, al banco, al videoclub, al supermercado, a la medicina privada. Nosotros, los que estamos habilitados, los que estamos de este lado del vidrio.
Antes que nada estaría bueno para los que no están enterados de esta medida que Macri intenta llevar a cabo, les voy a dejar un link a la noticia:
ResponderEliminarhttp://www.clarin.com/diario/2010/03/29/um/m-02169747.htm
Primero voy a opinar sobre esta supuesta medida de Mauricio, creo que es un buen intento para prevenir eventuales robos, mal entendidos u fricciones entre las personas. Nadie me puede negar que no le tienen miedo a los individuos que se acercan a ofrecerte dicho servicio, los tiempos no están para descuidos ni amabilidades, por ello mismo se intenta evadir con un “no” o un simple gesto. Uno se siente invadido y muchas veces al decirles que no, igualmente proceden a limpiarte el vidrio y cuando uno no les paga por el trabajo “no solicitado”, ellos sienten bronca, te insultan y en algunos casos dañan el auto. Con esto no quiero decir que todos los limpiavidrios o trapitos sean iguales, sino que a mi me gusta “Prevenir antes que lamentar”. Uno de los puntos que me gustó de la medida fue que se les permitiría trabajar a los que estén regulados por el gobierno Porteño, esto implicaría un mayor control y el trabajo estaría legalizado.
Volviendo puntualmente al tema de la entrada, ya que me desvié con la nota, estoy de acuerdo con que parecemos autómatas, que estamos aislados del resto, que mantenemos el mínimo contacto con los demás, habrá que ver porque será esto, para mi está mas que claro. Como uno no va a reaccionar de esta manera teniendo una inseguridad apabullante a su alrededor. No estoy a favor de los limpiavidrios, ni de los trapitos ni de los que hacen malabares como podrán ver, para mi no es un trabajo digno, con esto quiero dar a entender que hay otras variantes antes de ese supuesto empleo, hay personas que la pelean mas, mucho mas que estar acomodando autos, pasando un trapo o haciendo malabares con tres pelotitas. Quedarse con eso, es quedarse estancado, no querer progresar, por su propia dignidad tendrían que salir de ese pozo y buscar otras alternativas. El “no hay trabajo” no existe para mí, siempre hay algo, por más mínimo que sea, lo hay, pero claro, se necesita de empeño y esfuerzo para ganarse las monedas en ese trabajo escaso, entonces que mejor alternativa que ganar lo mínimo y hacer poco y nada en los semáforos.
Nuevamente quiero aclarar que no estoy metiendo a todos en la bolsa, siempre va a haber excepciones. También cabe destacar que detrás de todo esto puede o no existir una mafia que controle a esas personas dependiendo del lugar en el que se encuentren.
Prohibiendo a los trapitos y limpiavidrios es una manera de decir basta a ese negocio denigrante, es una manera de decir basta a tener que pagar cincuenta pesos para que no te rayen el auto, es una manera de decir basta a una pequeña porción de la inseguridad pero que es porción al fin y al cabo, y de alguna parte se tiene que empezar.
Tengo una opinion demasiada parecida a la de Tomás sobre este tema tan delicado como es el de los "Limpia vidrios". Yo creo que luchar contra los Limpia Vidrios es una tarea muy dificil, ya que aunque se intente combatir contra estas personas es muy dificil ya que el Gobierno o Mauricio Macri no pueden obligar a la poblacion a no darle una moneda a estos muchachos que por lo menos se mueven un poco por conseguir algo para alimentar a su familia o para su propia subsistencia. Tambien existen estas mafias las cuales involucran a niños y los mandan a pedirte una moneda por que te limpien el vidrio y por eso creo que la mejor solucion para eso es porai no darle una moneda y en su remplazo unos caramelos, yo en mi caso personal lo hago y los chicos y hasta gente adulta te lo agradece pero igualmente una realidad que es cada vez mas grande es que cada vez da mas miedo frenar en un semaforo, nadie sabe la respuesta que pueda llegar a tener el muchacho sino aceptas que te limpie el vidrio. un ejemplo claro me sucedio a mi en la terminal de omnibus de retiro el viernes pasado. Un chico que estaba por hay que tendria unos 16 años me vino a pedir si le compartia la comida la cual yo estaba comiendo y por la que me habian arrancado la cabeza y por esa razon no le convide con toda la razon y libertad del mundo y se fue. A los 5 minutos volvio otro al cual tambien le negue ese pedaso por las razones explicadas y en vez de irse sabiendo que era una de las respuestas mas obias que iba a escuchar, no tuvo mejor opcion de insultarme, por un rato, diciendome cosas que no me causaban gracia como un "te voy a matar" no me diste sandwich, ahora comprame un pancho, sos un gil, y boludeses por el estilo, las que te hacen pasar un mal momento, y esa misma reaccion uno en el auto puede llegar a recibir de algun muchacho que te quiera limpiar el vidrio y no aceptes.
ResponderEliminarEn conclusion creo que hay que continuar con esta intensa lucha contra los limpia vidrios ya que son un arma de doble filo. Como todos son personas y todas son diferentes uno nunca sabe cual va a ser su reaccion y con toda la realidad que sufre la Argentina hoy todo es un sintoma de riesgo
En mi opinión no culpo al limpia vidrios honesto, aunque creo que en un país serio no debería estar permitido este tipo de trabajo, no lo digo porque molestan en el espacio publico, seria egoísta, lo digo porque creo que es un trabajo insuficiente para satisfacer las necesidades de un individuo y mucho menos una familia. La solución no creo que sea expulsarlos de la vía publica, sino ofrecerles una buena educación con la cual puedan conseguir un trabajo mas apto.
ResponderEliminarDe esta manera uno imagina un país perfecto en el que todos trabajan y viven felices, pero todavía quedan aquellos limpiavidrios o trapitos etc. que prefieren forzar a que acepten su "trabajo" a través de amenazas y que prefieren vivir asustando a la gente antes que estudiar y trabajar honestamente. En estos casos tengo que admitir que no sirven mas que para molestar a los automovilistas e intimidarlos y uno preferiría que desaparezcan de la sociedad. Se que parece una mirada cerrada pero creo que trabajo no falta, lo que falta es voluntad, entiendo que una persona discapacitada pida dinero, ya que esta excluida socialmente pero un joven que puede perfectamente trabajar como mano de obra no.
Yo realmente concuerdo en partes con esta noticia. Luis lamentablemente no es un chico común, digo esto porque él tiene que salir a trabajar para ganarse la plata para comer, en vez de estar estudiando algo que le gusta. Lo que él hace, limpiar vidrios es un trabajo, algunos lo verán como que no lo es pero de hecho sí. Porque Luis podría estar robando en vez de limpiar vidrios, y de ese modo ganaría mucho más dinero, descartando que es más peligroso y que no está bien, etc. Luis aparentemente lo único que quiere es un lugar en esta sociedad, quiere salir adelante y capas de su punto económico es la única manera en la que podría llegar a triunfar. Muchos no van a concordar conmigo pero de hecho lo que Luis hace, es salir a ganarse el pan, del día a día y eso ya es un triunfo. Porque no es como en mi caso personal que mis padres me lo dan con frutos de su trabajo, Luis se lo gana.
ResponderEliminarYo por una parte estoy de acuerdo con lo que dijo franco, pero por otra parte no estoy de acuerdo.
ResponderEliminarPor una parte: estoy de acuerdo porque Luis, que si tiene nombre de rey frances y el no lo sabe, podría estar robando algun local chino o algun kiosco, o podria estar "jalando" por ahi buscando alguien a quién robar. Y por eso esta bueno que Luis este trabajando en las calles limpiando vidrios y tratando de ganarse la vida sin estar perjudicando a los demas.
Por otra parte: no estoy de acuerdo con que luis, con nombre de rey frances y el no lo sabe, trabaje en las calles limpiando los vidrios porque eso no es un trabajo, no es algo que tenga titulo, no esta en blanco ni esta en negro porque no esta contratado, trabaja para si es algo que ni siquiera es un trabajo, es supervivencia si se lo quiere llamar así. Si este fuera un país en el cual se los puede ayudar a los pobres y darles mas posibilidades Luis si sabría que su nombre fue de un rey francés, porque hubiese ido a la escuela y ahora podría tener un trabajo en serio y no estaría limpiando vidrios en la calle pasando hambre
Desde el punto de vista que lo pones Diego, es verdad el trabaja al igual que la mayoria de la gente, es mas podria decir que trabaja mas que ciertas personas ya que se pasa el dia entero y hasta ciertas horas de la noche limpiando parabarisas en el medio del centro no importa que sea pleno mediodia y a la luz del sol. En este caso, este Luis se trata de una persona ejemplar por lo menos desde mi punto de vista, le queres dar una moneda y no te la acepta y te limpia el parabrisas igual aunque este resplandeciente. La verdad es que estas personas sufren mucha discriminacion porque hay gente como este Luis que son honestos y quieren trabajar y llevar monedas a su casa y uno por miedo a que te pase algo ni abre la ventana, ni les da una moneda y se niegan antes de que se les pregunte algo, pero por otro lado es verdad que este miedo no nacio solo sino que capaz fue por experiencias anteriores no tan agradables. Pero a pesar de todo yo siempre que puedo trato de ayudar porque sinceramente algo estan haciendo no importa cual sea el trabajo pero estan haciendo algo para mejorar su situacion.
ResponderEliminarYo creo que tanto el como mucha otra gente que no tiene la suerte que tenemos nosotros y no por no trabajar en una oficina con secretaria no sea trabajar de verdad. Es mas me aprece que merece mas llamarse trbaajo ese que otro como los que estamos acostumrbados nosotros, porque requiere mas esfuerzo y ganas de rebuscartela con lo que podes y con la situacion que toco en la vida que obiamente no es buena.
ResponderEliminarUn limpiavidrios que no acepta limosnas merece ser nombrado como un trabajador y hasta mas trabajador que un presidente corrupto.
Nos quejamos de la inseguridad y el gobierno queire despojar a los limpiavidrios honestos , por darles una monedita.
Si a la gente pobre le sacas la posibilidad de hacer ese tipo de trabajo cuadno esta rebuscandosela honestamente no le va a qeudar otra opcion que robar porque de alguna forma hay que vivir y sin plata se hace mas complicado.
Todo trabajo es un trabajo de Verdad, sea ser el barrendero de barrio o ser un abogado conocido sigue siendo un trabajo de verdad. Esta gente que esta en cada esquina limbiando los vidrios de autos. Talvez sea la unica manera de ganar dinero a la que pueder recurrir. Ademas es mucho mejor que esten ahi limpiando vidros a que, talvez sean el malnacido labron que entra en nuestras casas a la noche, nos roban todo o nos matan solo para robarnos el celular por la calle.
ResponderEliminarEllos como no pueden coseguir un mejor trabajo que el que lipiar vidrios son considerados gente desempleada pero ellos no saben lo que se sufre siendo limpiavidrios. En verano no tienen aire a condicionado que solo apretan un boton y ya la sala en la que esta se enfria en unos 15 minutos, y en invierno no tienen una estufa para no tener frio, estan en el medio de la 9 de julio cuadandose de los autos para qe no los pisen y rezando para que la gente les de dinero cuando logran limpiarle el vidrio delantero.
Es un trabajo de verdad pero nadie lo acepta